Piedecuesta le apuesta a las segundas oportunidades con el programa de Justicia Restaurativa
Reclusos de la cárcel de Palogordo de Girón del programa Justicia Restaurativa, en convenio con el INPEC
Piedecuesta se une al programa Justicia Restaurativa, en convenio con el INPEC, para brindar segundas oportunidades a los reclusos de la cárcel de Palogordo de Girón. A través de este programa, los privados de la libertad realizarán labores sociales en el municipio, contribuyendo con su trabajo a la comunidad.
Para Juan Pablo Candela, uno de los reclusos beneficiados, esta iniciativa representa un nuevo comienzo:
“Uno se siente libre por acá y puede empezar a servirle a la sociedad. Después de tanto daño que uno hace, que lo tengan presente para resarcirlo, es muy significativo.”
El alcalde Óscar Javier Santos Galvis destacó la importancia de este convenio y el impacto positivo que tendrá en la comunidad:
“Necesitamos de esa mano amiga, de ese conocimiento en la limpieza de parques, en la construcción. Queremos que sepan que aquí tienen un alcalde amigo y un equipo de gobierno dispuesto a trabajar juntos por el bienestar de Piedecuesta.”
Por su parte, el capitán Eleasid Durán, director de la cárcel de Palogordo, resaltó que este programa es una oportunidad de redención para los internos:
“Este es un mensaje de segundas oportunidades y de Justicia Restaurativa. Los privados de la libertad quieren resarcir el daño a la sociedad con actividades de poda, pintura, adecuación, siembra y recuperación del medio ambiente.”
Además, explicó que quienes participan han avanzado en su proceso de resocialización y se encuentran en fases de mínima seguridad y confianza.
Finalmente, la Gestora social de Piedecuesta, Oliva Santos Galvis, reiteró el respaldo a esta iniciativa:
“Confiamos en ellos y en el buen trabajo que inician hoy. Agradecemos al INPEC por sumarse a esta causa que fortalece nuestra comunidad.”
Con este programa, Piedecuesta demuestra que la rehabilitación y la reconciliación son posibles cuando la comunidad trabaja unida. ¡Todos merecemos una segunda oportunidad!
